Los Ácaros del polvo son pequeños animales microscópicos, (miden aprox 0.3 milimetros) emparentados a las arañas, (artrópodos) que habitan en casi todos los lugares del mundo, prefiriendo las zonas de clima templado y humedad relativa alta.
Su hábitat más frecuente es el polvo del interior de las casas. Como dependen de la humedad y son algo fóbicos a la luz ,sus lugares favoritos para vivir son colchones, almohadas, peluches, alfombras, etc. En estos lugares encuentran además uno de sus alimentos favoritos, como son las escamas de piel humana y animal.
Sus deposiciones y diversas partes de su cuerpo contienen las partículas que al volatilizarse y tomar contacto con la mucosa (revestimiento interno) nasal o bronquial producirán en éstas una inflamación que derivará en rinitis alérgica y/o en asma bronquial.
A diferencia de los pólenes, su estacionalidad es menos notoria y se los encuentra presentes todo el año, sobretodo en zonas húmedas como la costa donde su concentración (salvo excepciones)es mucho mayor que en lugares del interior donde el clima es más seco.
A pesar de esta diferencia entre la costa y las zonas mas secas, en Chile es también frecuente registrarlos en ciudades de interior si las casas son húmedas o existen en ellas condiciones que favorezcan su crecimiento como son alfombras, peluches, libros, plantas de interior, etc.
SÍNTOMAS
El paciente alérgico a los ácaros desarrollará habitualmente síntomas de rinoconjuntivitis alérgica y/o asma bronquial durante todo el año pudiendo los síntomas fluctuar levemente según las estaciones, siendo algo más intensos en invierno.
Muchas personas que dicen resfriarse mucho o tener un resfrío pegado o presentar muchas sinusitis durante el año, esconden bajo estas manifestaciones una alergia a los ácaros del polvo, que podrán estar, ya sea generando los síntomas, o predisponiendo la mucosa para la aparición de complicaciones como la sinusitis.
COMO SE SOSPECHA
Síntomas de secreción nasal mucosa blanquecina o aguachenta persistente fluctuante en el día muchas veces peor por las mañanas .Congestión nasal frecuente siendo en general esto peor en las noches, estornudos y picazón nasal frecuente. Estos síntomas de rinitis son habituales en todo el año y se gatillan y empeoran generalmente con el polvo en el interior de las casas y con los cambios de temperatura.
Muchas veces el problema se detecta por una sinusitis que se repite. También los ácaros del polvo pueden ser causantes de cuadros de asma bronquial y conjuntivitis alérgica.
En los niños, en especial los lactantes, los ácaros son la causa de muchas dermatitis atópicas.
Síntomas de obstrucción respiratoria asmática son típicamente: dificultad para respirar, silbidos en el pecho, sensación de opresión torácica, tos seca mas frecuente en las noches o tras hacer ejercicio
COMO SE DIAGNOSTICA
El Diagnóstico se hace a través de la historia clínica y se corrobora con exámenes de laboratorio. Los clásicos exámenes usados en el diagnósticos son los test cutáneos y la medición de anticuerpos específicos contra el ácaro del tipo IgE en sangre (este examen no es necesario la mayoría de las veces).
Adicionalmente, y dependiendo de cada paciente, se podrán complementar estos exámenes con radiografías, escáner, citologías, pruebas de función pulmonar etc.
Que Hacer :
Una vez realizado el diagnóstico por un médico y prescrito los medicamentos necesarios (generalmente una combinación de antihistamínicos, corticoides tópicos e inmunoterapia en ocasiones, todo lo anterior dependiendo del caso en particular), el paciente podrá ayudar enormemente en el control de su enfermedad si lleva a cabo las siguientes medidas de control ambiental:
Las medidas más eficientes para disminuir el nivel de ácaros donde vive el paciente son:
Bajar la humedad relativa del ambiente donde vive el paciente a niveles menores del 50%. Esta medida no es fácil de implementar, pero si se logra es sumamente efectiva, ya que los ácaros difícilmente podrán prosperar en estas condiciones.
Eliminación de alfombras, principalmente en el cuarto del paciente. Preferir pisos de madera, cerámica, linoleum, etc
Eliminación de peluches, libros, y otros elementos que acumulen polvo en el cuarto del paciente
Uso de cobertores antiácaros para colchones, almohadas
Sacar el polvo de las superficies con trapo húmedo (no sacudir)
Uso de espray o shampoo antiácaros para alfombras y muebles a base de taninos naturales (acido tánico) y/o otros productos certificados que no tengan compuestos volátiles orgánicos.
En ocasiones es útil el lavado de sabanas y, frazadas y cubrecamas cada 10 a 15 días a temperaturas iguales o mayores a 55ºC o usando aditivos antiácaros a temperaturas normales. Se recomienda un buen secado a la intemperie