La alergia a los frutos secos es una de las más frecuentes , siendo la alergia a la nuez la más común. No obstante le siguen cerca la alergia a la avellana, almendra, maní, etc.

En muchos pacientes, la alergia a los frutos secos, no pasa de picazón en la boca y orofaringe, siendo por tanto un problema leve que no plantea ningún peligro serio para su salud.

Por el contrario, en otros pacientes la alergia a los frutos secos puede dar lugar a reacciones alérgicas muy graves que pueden incluso costarle la vida. Algunos de estos pacientes antes de la reacción grave ya habían tenido reacciones previas leves, con solo picor orofaríngeo, tras la ingesta del fruto seco.

¿Entonces que debo hacer?

Para saber si eres alérgico a los frutos secos, debes ir a tu alergólogo o inmunólogo. Te realizará unas pruebas cutáneas con extractos de diferentes frutos secos y en 20 minutos te dirá si sufres de alguna alergia a alguno(s) de ellos.

En caso positivo, te debe realizar unas pruebas en sangre, para determinar a qué tipo de proteínas te has hecho alérgico

Si son proteínas tipo PR 10 o Profilinas, estas no plantean problemas serios para el futuro, por el contrario si son proteínas de tipo, “proteínas de almacenamiento» o LTPs, desgraciadamente si podrían potencialmente en el futuro causar un shock anafiláctico mortal.

En el primer caso normalmente no es necesaria una restricción dietética, ni siquiera llevar el auto inyector de adrenalina, por el contrario en el segundo sí.

En el Centro del Alérgico disponemos de un test o exámenes adecuados, entre ellos el Test Faber , que nos permite saber si eres alérgico no solamente a los frutos secos y sus componentes moleculares, sino también a resto de alimentos, inhalantes, látex y venenos, cubriendo de

una sola vez casi 300 alérgenos.