La Inmunoterapia puede ser una solución a las alergias

Este tratamiento puede ser vacunas inyectables o gotas sublinguales.

Si eres alérgico al polen, los ácaros del polvo o el veneno de abejas o avispas y el tratamiento con medicamentos orales no logran controlar tus síntomas  que terminan por dificultar tu rutina diaria,  el Centro del Alérgico ofrece un tratamiento que te puede ayudar: las vacunas hiposensibilizantes o desensibilizantes.

 Pedro Mardones,  médicoInmunólogo y Director del centro del Alérgico, explica que “las vacunas o inmunoterapia para el tratamiento de las alergias existen en forma inyectable (subcutáneas) y en forma oral (gotas sublinguales)”.

“Este tipo de tratamiento consiste en administrar aquella sustancia a la cual el paciente es alérgico (ácaros, polenes, venenos de abejas o avispas) pero partiendo de dosis muy bajas y subiéndolas progresivamente, hasta alcanzar una dosis de mantención, que se administra una vez al mes para las formas inyectables y a diario en la forma oral”, indica la especialista.

El objetivo de esta terapia es lograr que el sistema inmune de cada persona genere tolerancia a aquello que antes reaccionaba con una alergia, esto es una respuesta exagerada del organismo ante la presencia del alérgeno.

“Este tipo de tratamiento lo indican inmunólogos quienes deben evaluar a cada paciente para determinar sus probabilidades éxito, los beneficios de esta terapia y sus eventuales contraindicaciones”, recalca la doctor Mardones.

 Respecto de la edad, el especialista señala que la inmunoterapia puede realizarse a cualquier edad. “En los niños se prefiere comenzar cerca de los 6 a 7 años, una vez que su sistema inmune ha alcanzado madurez. En algunos casos bien seleccionados, como por ejemplo reacciones severas con picaduras de abejas, podemos comenzar antes”, señala.

 Para las demás personas y otros rangos de edad, explica “Debe evaluarse caso a caso para establecer los riesgos y beneficios, incluyendo en esta evaluación”. Caso particular son las pacientes embarazadas, en quienes no es recomendable iniciar una inmunoterapia, salvo que se haya embarazado estando ya en tratamiento. En estos casos, no hay contraindicación para mantenerla.